La piel es grasa cuando las glándulas sebáceas producen lípidos de manera excesiva.

Suelen tener las siguientes características:

  • Poros amplios en todas las zonas grasas, esto por el exceso de sebo acumulado.
  • Pueden tener textura de “piel de naranja”, son protuberancias y huequitos pequeños.
  • Suele verse gruesa y brillante.
  • Es común que tengan puntos negros, espinillas y/o acné.

También, son pieles que se benefician de la cantidad de grasa porque envejecen lentamente al mantenerse humectadas pero puede tener un efecto negativo en personas con acné. Estas mismas características aplican para las zonas grasas de personas con piel mixta.

Además de la genética (por supuesto) existen otros factores que pueden ocasionar que nuestra piel sea grasa. Aquí algunas de ellas:

  • Falta de limpieza o demasiada limpieza. ¿Qué es demasiada limpieza? Más de dos veces al día con un limpiador muy fuerte, por ejemplos uno de los casos que más nos llegan son personas utilizando jabón de azufre más de dos veces al día combinado con falta de humectación. La limpieza excesiva provoca que la piel grasa se reseque (aunque no parezca porque sí, la piel grasa se reseca)
  • Exceso de exfoliación física. Sobre estimular la piel también puede provocar exceso de grasa y además irritación en zonas de espinillas. Con 1 o 2 veces por semana es suficiente si no tenemos piel sensible. La piel no debe ponerse roja ni irritada.
  • Falta de hidratación y humectación. Esto va a provocar que la piel trate de balancearse produciendo más grasa.
  • También influyen nuestras hormonas, hábitos y edad. Nuestra piel va cambiando y de esta manera sus necesidades.

Ahora, ¿cómo cuidamos la piel grasa?

  • La limpieza frecuente y adecuada, en la mañana y en la noche con un jabón delicado y aplicándolo suavemente, es uno de los pasos más importantes en el control de la piel grasa. Remover el exceso de sebo e impurezas va a reducir los problemas (por ejemplo, espinillas) que se originan al tener grasa acumulada. Recomendamos nuestro Limpiador Facial Matcha, la Niacinamida es un ingrediente perfecto para regular la producción de sebo.
  • Hidratación para evitar la sobre producción de grasa. Te recomendamos dos productos: nuestro Tónico facial con centella asiática y pantenol y nuestro Serum Niacinamida.
  • Humectantes ligeros, algunas personas de piel grasa prefieren utilizar bloqueadores humectantes para mantener una rutina más simple (importantísimo, aplicar el bloqueador con SPF adecuando y la cantidad recomendada)
  • Si te gusta podés ayudar a tu piel con mascarillas 1 a 2 veces por semana. Todas nuestras mascarillas podés encontrarlas aquí. Especialmente la Mascarilla Desintoxicante es ideal para piel grasa.

¿Puedo usar un aceite facial en piel grasa? Sí. Suena raro aplicar aceite sobre piel grasa, pero cuando aplicamos el aceite facial adecuado la piel “entiende” que ya no debe producir esa grasa que agregamos y empieza a balancear y disminuir la cantidad de grasa que produce. Nuestro aceite facial para piel grasa es el de Lavanda Jojoba. Recomendamos empezar a utilizarlo en la rutina de la noche, 3 gotas en cara y cuello como último paso.

Recordá, que más importante que un tipo de piel es que la piel esté saludable. Y que cuidándola la amemos tal y como es.

Wilkinson, J; Moore, R. (1990). Cosmetología de Harry, EEUU, Díaz de Santos.

Azcona, L. (2006). Piel grasa y acneica. Dermofarmacia, 20, 60-63